Edición Especial
La trilogía de videojuegos BioShock es un faro al que muchos miramos para no perdernos. Un haz de luz desde el que podemos observar una ciudad tan rica, tan detallada y compleja que podría llegar a ser real de no ser por el hecho de encontrarse en el fondo del océano o en mitad del cielo. BioShock es, para muchos, una de las mejores sagas de las dos primeras décadas del siglo XXI. BioShock y el alma de Estados Unidos plantea un recorrido por la historia de la franquicia y la de todos sus protagonistas. Dentro de la obra de Irrational Games se esconde el alma de Estados Unidos. En ella yacen escondidos los valores, los ideales y los mitos más profundos y arraigados de este país: la libertad, la excepcionalidad y la valentía. Pero también sus reversos: el racismo, la desigualdad y el fundamentalismo. Dentro de las paredes y los túneles de Rapture no solo acechan gigantes, hombres de hierro y violentos adictos, también el peligro de la falta de límites y reglas dentro de una sociedad. En las nubes de Columbia no solo se esconden pájaros metálicos dispuestos a acabar con nosotros para salvar a su pequeña, también está el peligro del racismo, el nacionalismo exacerbado y el fundamentalismo religioso. BioShock y el estudio que le insufló vida supo crear un mundo, tan real y tan fantástico a la vez, que nos obligó a mirarnos a nosotros mismos mientras salvábamos o éramos salvados por las Little Sisters o por Elizabeth.